Tuve la suerte de ver como tiraban la puerta cementada de Montamarta. Fue un momento enorme, allí estaba con Alma y Javi sabiendo lo que significaba ese gesto para todos los que estaban allí pues habían luchado mucho por ello.
Un día nos hicieron una visita algunos de los participantes en la transformación del Montamarta. Dejo en enlace para quién quiera saber qué han hecho o van hacer (
http://evmontamarta.org/).
Me quedo con estas reflexiones:
- En este espacio okupado (y por lo que sé en todos) lo importante no es qué hacer con él, no se okupa un espacio para hacer un taller de no se qué o un espacio para hacer tal cosa, sino que se okupa para dar cabida a lo que necesiten o quieran sus vecinos y, lo más importante, de una manera TOTALMENTE HORIZONTAL. Son más importantes las formas que el fin. Se ejempliza con democracia real desde Montamarta.
- Una compañera dijo que le había gustado cómo habían expuesto la historia de Montamarta porque lo habían hecho de manera neutral intentando dar una idea sin carga ideológica para que fuésemos nosotros los que eligiéramos si estábamos a favor de lo que hacían y cómo lo hacían o no. Ricardo dijo que lo que hacían estaba repleto de una ideología concreta, que no nos confundiéramos. Estuve pensando que la gente (generalizo, pero no es todo el mundo) tiene un prejuicio creado, en este caso, por los medios de comunicación, hacia la akupación y quién la realiza y, derrepente, ven de cerca un caso, conocen las causas, conocen quién lo realiza y cómo, y su cerebro prefiere pensar que no son de tal bando porque eso que conocen es "malo" a pensar que sus prejuicios estaban mal fundamentados.
