Uno de los temas que más me ha calado este año. Siempre he pensado en las niñas y niños como personas a las que escuchar, de las que se aprende, a las que hay que educar para pensar críticamente, a los que hay que enseñar a través de la actividad directa, no solo teórica, y desde la diversidad de opciones. Pero nunca había pensado en ellos como agentes de cambio. Nunca se me había ocurrido que su visión de las cosas puede ser tan válida e importante como la de cualquiera. Hubo un ejemplo que me impactó concretamente: si pensamos que hace unas décadas la opinión de un extranjero o de una mujer era inválida, descartada, tomada como inferior a cualquiera o nula y pensamos en el cambio de mentalidad que ha habido, podemos pensar que ahora podríamos tener una idea equivocada respecto a la capacidad de los menores. No sé porque pero esta reflexión me dió que pensar. Solo hay que ver este vídeo para al menos plantearte que la edad no es requisito para excluir la validez de una idea:
Las ideas de Francesco Tonucci sobre la participación infantil : "La calle es peligrosa porque no hay niños"
http://www.eldiario.es/andalucia/Francesco-Tonucci-exito-escolar-relacion_0_103940046.html
La escalera de Hart
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